Este Sábado Santo, los feligreses pereiranos rememoraron la angustia y dolor de María debido a la muerte de Jesús al acompañar los cortejos procesionales de la Catedral Nuestra Señora de la Pobreza por las principales calles céntricas del municipio.

El recorrido que inicio en la Plaza de Bolívar contó con la participación de decenas de niños, niñas, mujeres y sus familias, muchos vestidos de negro en señal de luto. La Primera Dama de la ciudad, Lina Marcela Muñetón Agudelo, acompañó las diferentes congregaciones de María existentes en la capital risaraldense, protagonistas de este tradicional acto solemne que a través de los años se ha convertido en uno de los más esperados por propios y visitantes dentro de la programación de la Semana Mayor.

“Esta época de conversión y renovación de la fe cristiana se vivió con devoción en la Capital del Eje; compartimos la programación de la parroquia Nuestra Señora de la Pobreza, Catedral de la ciudad y acudimos al llamado del Obispo Rigoberto Corredor Bermúdez, en quien reconocemos apoyo y acompañamiento”, manifestó la Primera Dama de los pereiranos.

La actividad religiosa, que recorrió la zona céntrica de la Capital del Eje, tuvo a su paso cinco tarimas líricas, con presentaciones de artistas pereiranos, ofreciendo un mayor fervor católico y un aporte cultural de gran trascendencia, así como una distinción especial a la tradicional Semana Mayor de los pereiranos.

“Destaco la nutrida asistencia que han tenido este año las procesiones y el buen comportamiento de la ciudadanía; aportar y trabajar por mantener las tradiciones es también un compromiso de la actual administración municipal”, agregó la Gestora Social de la ciudad, quien se ha destacado por emprender programas y acciones en favor de las poblaciones vulnerables que conforman la Perla del Otún.

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