Más de $3.890 millones se invertirán para prevenir afectaciones por fenómenos naturales.

Superado el incidente con los habitantes de Belén de Umbría sobre el trazado que deberían tener las obras de protección y de control del cauce de la Quebrada Arenales, la Corporación Autónoma Regional de Risaralda, CARDER, avanza en la ejecución de los  $3.891 millones que gestionó ante el Departamento para la Prosperidad Social, DPS.

“Lo importante es que tanto como la comunidad como nosotros hemos quedado a gusto con el trazado, ahora todo va de acuerdo como está establecido en el cronograma de obra y antes de terminar el año tendremos la canalización que permitirá reducir los riesgos y beneficiar a los belumbrenses”, señaló Martha Mónica Restrepo Gallego, Directora (e) de la CARDER.

Cabe resaltar que esta obra está diseñada para soportar el caudal de la avalancha que se registró en el 2010, esto es 33,5 m3/s, cuatro veces la capacidad hidráulica de la canalización actual, que data de 55 años atrás; así mismo, no existe una franja de operación y mantenimiento, que sí se tiene prevista en los actuales diseños que requieren 9,60 metros de ancho, incluyendo 3 metros de franja a cada lado para la construcción, operación y mantenimiento.

Esta intervención es de especial interés para la Corporación, debido a los riesgos latentes, como el mal estado estructural que tiene el cruce sobre el barrio San Martín, las conexiones de alcantarillado que están dispuestas directamente sobre la canalización, además de que la placa de fondo presenta un fuerte desgaste por socavaciones en algunos tramos.

Por último es preciso recordar que esta intervención en Belén de Umbría, hace parte de los más de $15.300 millones que también se están invirtiendo en obras de mitigación en Pereira y Dosquebradas.

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